A propósito de que he deseado tanto verte…

Esta tarde tengo frío, pareciera que la necesidad de ti, en este día, no ha hecho más que intensificarse, producto de lo fallido de nuestro encuentro, pero también parece que estás tan lejos, estando tanto y eso me remece cuando vuelvo a caer en la cuenta de los días siguen ocurriendo, y hay noches en que me desvelo anhelando un cuerpo que me acompañe, pero también advierto que no es precisamente eso lo que resolverá el nudo de ser…Y sigo avanzando dejando de lado cualquier intento de poseerte. Amor total, amor de lejos, amor atado, amoratado tengo el corazón y eso es, eso es lo que signa las carencias de saberte perdida en la carrera, porque nada de lo que necesitas alberga mi corazón, nada de lo que precisas te será dado desde acá. Porque no te creo, porque no me la juego, porque no eres para mi…porque el coraje que tenía lo ocupé en lanzarme al vacío con los ojos abiertos que de tan abiertos se secaron de lágrimas y sólo quedó en ellos la mirada del dolor, de lo que resuena, del desencuentro, y ahora no me acabo de decidir a emprender el desafío de recuperar, rearmarse, volver a amar, volver a creer, eso ya no lo podré hacer. Tal vez alguna vez juegue, tal vez algunos días sonría, pero mi condena ya fue dictada, de lo otro no se me permite más…